Inventario y rendición de cuentas.
Parece muy difícil, pero por el contrario es extremadamente fácil, cuando comencé a escribir en este medio, me propuse hacerlo como un acto de autodisciplina, mi compromiso conmigo mismo era el de hacerlo todo los días, de una manera responsable, positiva y si fuera posible amena.
1) Lo de todos los días como una manera de probarme a mi mismo, la teoría que tantas veces he escuchado de que si se hace algo de manera continuada durante 21 días, crea un hábito de hacer las cosas, se vuelve costumbre y es mas fácil realizarlo sin tener que planearlo por adelantado. La teoría ha sido netamente probada, hoy para mi es fácil sentarme en la computadora a comunicarme con Uds., además este tipo de disciplina la he venido aplicando diariamente a todas mis actividades, esto ha cambiado notoriamente mi forma de enfrentar el trabajo y el no dejar para mañana lo que puedo hacer hoy. Una lastima que sabiéndolo por tanto tiempo, me haya decidido a aplicarlo recién ahora, pero como es sabido, “nunca es tarde cuando la dicha es buena”.
2) Responsable, creo que mal o bien, con capacidad o sin ella, he volcado todo lo mejor de mi en esta hermosa tarea de mantener contacto con Uds. y conmigo mismo. Cuando uno se dedica con placer y gusto a volcar sus pensamientos y además a hacerlos públicos, puede llegar a hacer una autocrítica beneficiosa, ya que el examinarse a si mismo y conocerse cada día un poco mas, libera un montón de ideas, recuerdos y proyectos, trayendo al tapete épocas, amigos, hechos y lugares que quedaron archivados pero nunca revisitados. Una retrospectiva, mientras no se haga como revisionismo histórico, es siempre productiva. Cuanto más me conozco y me quiero a mi mismo, mas conozco, quiero y aprecio todo lo que tengo alrededor.
3) Positiva y amena, esa se las dejo a Uds. para examinar, lo que para uno puede ser muy interesante, para otros puede ser simplemente una manera de matar el tiempo. A mi personalmente, no me gusta “matar el tiempo”, creo es muy poco el que pasamos en esta vida, por lo tanto, prefiero “vivir mi tiempo”, disfrutarlo a pleno, saborearlo como si fuera un vino nuevo recién descorchado, empaparme en el, como lo haría en un baño de agua de jazmín, disfrutarlo con alma y corazón, como cuando abrazo a mis nietas o recuerdo mi noche de bodas. Por eso quizás lo que para mi es ameno, no llegue a muchos, pero es lo que tengo para ofrecer y lo hago sin pretensiones, con humildad y con la alegría de saber que siempre alguien lo va a apreciar.
Por todo lo antedicho, voy a seguir en el mismo camino, pero con un nuevo agregado a la disciplina. Desde ahora en adelante me propongo tanto aquí como en mi vida en general, no hacer o escribir nada que no sea en “buena onda”, tratare de nunca criticar o decir cosas negativas de nada o de nadie, tratare que mis criticas sean siempre constructivas y encontrar mas palabras para el elogio y menos para los reproches.
Si logro esto, estoy convencido que me convertiré en una mejor persona y viviré en un mundo mejor. Al que se sienta con ganas de recorrer esta ruta conmigo los invito a leer todos los días mis elucubraciones, yo no soy líder, pero por ese camino podemos juntos avanzar paso a paso.
Si es posible dejen comentarios para hacerme saber que estamos juntos, o para corregir la ruta si ven que me desvío.
El Tordillo
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